Enfrentado al infinito silencio


Enfrentado al infinito silencio de mis cuatro paredes donde soy yo amo y señor de
palabras vertidas en vastas hojas en blanco, pienso y veo el lento de degradee de la
tarde azomar las primeras estrellas de la noche que caen sobre el mundo, como la arena
del tiempo que escapa entre mis manos, un salto al vacio, comienza la cazeria de quimeras
caen los parpados y ese desfallecer centenario consume mis sentidos mis angustias y
reencuentro el coraje, la fuerza despierta del letargo subitamente, ahora hay fuego, en el alma en la mirada en los rincones vuelto a la vida en medio de mis propias cenizas es hora de seguir el mundo espera...............

J.A.


04 de agosto de 2008

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